Una vez que ingresamos al Hospital La Paz de la ciudad de Madrid-España; se nos dió el diagnostico formal y la explicación de su tratamiento.
Al revisar su informe medico de Ecuador observaron que Ariah habia recibido numerosas transfusiones de plaquetas, lo cual es antiproducente en este tratamiento pues al tumor alimentarse de plaquetas, lo que estábamos haciendo era fortalecer el tumor. Adicionalmente y para el asombro de todos los medicos, Ariah estaba tomando Prednisona (corticoides) en dosis muy altas lo cual no es aconsejado pues los corticoides al tiempo que tratan un sintoma en especifico, esconden los verdaderos signos de la enfermedad. La retirada de los corticoides del organismo es lenta y escalonada, y durante el proceso en el paciente se pueden presentar efectos secundarios que sólo empeorarían la enferemedad principal, como lo hizo con Ariah.
Ariah empezaría finalmente su tratamiento de quimioterapia a través de una vía central (port-a-cath) para la Vincristina y oral para la Aspirina, Ticlopidina y Prednisona, asi como Omeprazol (protector gástrico). Se nos explicó el proceso de quimioterapia y sus efectos. Al ser una bebe las enfermeras me permitieron ser parte de la terapia para darle tranquilidad a mi hija. Pasados casi dos meses de quimioterapia, y al mantenerse sus niveles de plaquetas aún bajos, se adicionó un medicamento al tratamiento como parte del proceso experimental: Rapamune (Sirolimus), a la semana del control obtuvimos un aumento considerable de plaquetas, y asi continuo hasta mantenerse en los niveles actuales.
Ariah hoy esta en remisión, con controles anuales.